ORIGEN DEL R∴ N∴ M∴
La Revolución Francesa, al terminar el periodo de luchas entre los grupos nacidos en proceso de su desarrollo, minó los regímenes de tiranías, que se basaban en el llamado “derecho divino”, y eliminó los obstáculos para el desarrollo del pensamiento liberal progresista. Los intereses que se disputaban en la lucha revolucionaria quedaron agrupados alrededor de dos tendencias antagónicas: Conservadora y liberal., cuyos privilegios de tipo medieval estaban condenados a desaparecer, consideraban la revolución como un movimiento puramente negativo, que destruía, pero era incapaz de crear cosa alguna. Los partidarios de este grupo impulsaban el movimiento tradicionalista, francamente reaccionario, que añoraba y glorificaba el “ancient régime” y maldecía de la Razón endiosada por los revolucionarios. Políticamente los conservadores se pronunciaban por la tiranía monárquica y la restauración religiosa. Sus filósofos predilectos de la época eran José de Maistre, Luís de Bonald, Benjamín Constan, Hugo Felicitas de Lamennais y otros que se dedicaban a atacar de distintos ángulos el espíritu liberal de sus adversarios y criticaban acremente los sucesos de la Revolución Francesa.